Puebla es uno de los estados más importantes de México, referente de infraestructura tecnológica, innovación en sistemas de movilidad y desarrollo urbano, social y sostenible a nivel Latinoamericano.

Puebla: Patrimonio, innovación y crecimiento empresarial

Con una capital reconocida por su riqueza histórica y cultural, ha sido galardonada por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad, lo que resalta su invaluable legado arquitectónico e identidad. Su vibrante ecosistema empresarial y la colaboración entre el sector público y privado hacen de Puebla el lugar ideal para llevar a cabo eventos empresariales, de bienestar y desarrollo, reafirmando su rol como una ciudad en plena proceso de transformación y crecimiento.

Te invitamos a descubrir las maravillas del estado de Puebla.

No dejes de explorar sus pueblos mágicos, una fusión de paisajes impresionantes, arquitectura colonial, sabores locales y una calidez única en México.

Cuetzalan

Pueblo Mágico que habita en la sierra entre bosques con niebla, cafetales, cascadas, cuevas, grutas y helechos gigantes; allá donde los pájaros inician sus cantos y el propio significado de su nombre lo afilia con la divina ave mítica de las culturas prehispánicas: el quetzal.

Cholula

Si en Puebla se muestra el arte novohispano en todo su esplendor, en Cholula se respiran profundos aires prehispánicos. La ciudad fue levantada sobre los cimientos de una importante urbe indígena en donde se edificaron diversos templos y adoratorios, sobre los cuales más tarde se construyeron templos católicos; hoy Cholula tiene 37 iglesias; algo sorprendente para una ciudad de su tamaño.

Atlixco

Este Pueblo Mágico convive con el volcán Popocatépetl. Donde te ubiques, sea una terraza o en la punta del Cerro de San Miguel, el coloso siempre vigila y recuerda su presencia a través de una bocanada. Visitar Atlixco es una aventura aromática y multicolor. Este pueblo presume su clima como superior al del resto de México pues aquí hay arboles, flores, frutas y plantas por dondequiera.

Chignahuapan

Aquí descubrirás tal belleza de la selva que parece extraída de un libro de aventuras: todos los días un telón de bruma se abre lentamente con la luz del alba para descubrir laderas inclinadas, árboles frutales y cafetales; dejando ante tus ojos hermosas cascadas y una laguna al centro rodeada por ríos y pozos termales.